Juan Luis Sosa: 17 años de dedicación al Mercadillo de Tegueste
El Mercado del Agricultor y Artesano de la Villa de Tegueste no sería lo que es hoy sin la huella que ha dejado Juan Luis Sosa a lo largo de sus 17 años de entrega. Su labor ha sido clave para el crecimiento, la consolidación y la proyección de este espacio, que hoy se reconoce como un referente de los mercados de producto local en Canarias.
Quienes han trabajado a su lado, como la presidenta de la Asociación del Mercado de Tegueste, Nieves Rebenaque, destacan que Juan Luis “ha dejado una huella enorme, marcada por su dedicación y su manera generosa de volcarse en este proyecto. Gracias a su implicación, el Mercado pudo crecer y darse a conocer, siempre poniendo en valor al sector primario y a las personas que lo sostienen. Más que un gran profesional, ha sido un compañero cercano y una persona excepcional, que dedicó 17 intensos años de su vida al Mercadillo y que deja tras de sí un recuerdo imborrable”.
El reconocimiento no se debe solo al tiempo invertido, sino también a la calidad de su gestión, considerada ejemplar y fundamental para posicionar al Mercadillo de Tegueste como un referente en Canarias.
El pasado 1 de junio, Juan Luis Sosa decidió centrar plenamente sus esfuerzos en el otro proyecto profesional que venía compaginando desde hacía cuatro años. Con ello puso fin a su etapa en la gestión del Mercadillo, dejando en manos de Enrique Bermúdez Bethencourt la responsabilidad de continuar su labor. Con Enrique compartió esos años de trabajo y aprendizaje, y él mismo quiso expresar su gratitud: “Desde aquí aprovecho para rendirle un sentido homenaje y manifestarle mi profundo agradecimiento por su enorme generosidad, habiendo apostado por mí y proponiéndome a la Junta Directiva para continuar manteniendo a flote este buque insignia del municipio teguestero”.
Hoy, el Mercadillo de Tegueste sigue siendo un espacio de encuentro, abastecimiento y convivencia, gracias a la huella imborrable que ha dejado Juan Luis. Aunque ahora su camino esté enfocado en otro ámbito, lo sembrado en el Mercado seguirá creciendo, porque cuando se trabaja con pasión, lo construido permanece vivo en cada rincón y su legado sigue latiendo en la familia que ayudó a construir.