Algo más que Mercadillos…
Toca resaltar el papel de la pequeña producción agropecuaria en nuestro sistema alimentario y redoblar esfuerzos en políticas públicas en beneficio de este sector tan estratégico para nuestra tierra.
Corren tiempos de facilitar el acceso de los pequeños productores hortofrutícolas y de las familias agrarias a los servicios necesarios para la producción, comercialización y uso de los recursos agrícolas.
Hay que asegurar la soberanía alimentaria, la resiliencia y adaptación al cambio climático, y repensar el enfoque de integrar a los pequeños productores en las cadenas de suministro.
Los mercadillos bien organizados ofrecen certidumbre a los que nos dedicamos a producir alimentos llegando directos a los clientes sin intermediación y ganando lo justo por nuestro esfuerzo y trabajo. Estas entidades de comercio minorista también pueden tener una variante que es abastecer al sector HORECA (hoteles, restaurantes y cafeterías), comedores escolares o centros sociosanitarios públicos, si hubiese un ente público (sin buscar beneficio) que agrupara los excedentes de los asociados y los comercializase a un precio digno. Esto sería una manera efectiva de incrementar la superficie cultivada, y por tanto, asegurar más cuota de soberanía alimentaria.
Ya no cabe importar alimentos baratos de donde sea, y generar divisas a partir de actividades desvinculadas de la producción agropecuaria.
Enrique Bermúdez Bethencourt, gerente del Mercadillo de Tegueste