El bubango, la calabaza y el calabacín son los protagonistas del mes de noviembre en el Mercadillo del Agricultor de Tegueste gracias al programa de valorización del producto local Tesoros Agroalimentarios.

Tras disfrutar de las fresas en el mes de junio, del berro en julio, la sandía en el mes de agosto, el aguacate en septiembre, y los pimientos y pimientas canarias  en octubre, el mes de noviembre lo dedicamos a este trío, bubangos, calabazas y calabacines pertenecientes todos a la misma familia; las cucurbitáceas.

Con este post tratamos de dar a conocer algo más de unos productos de gran arraigo en nuestro territorio, de productos siempre presentes en los hogares canarios y en numerosas recetas gastronómicas.

Y es que los Tesoros Agroalimentarios, que desde el año 2011 se vienen desarrollando en Tegueste a parte de poner en valor el producto local también trata de generar conexiones con los productos locales de calidad, a la vez que fomentar los circuitos cortos de producción, comercialización y consumos que representa el Mercado del Agricultor y Artesano de la Villa de Tegueste.

Pasamos a dar algunas pinceladas de los bubangos, calabazas y calabacines.

Calabacín (Cucurbita pepo L.)

El calabacín es el fruto en baya de la planta del calabacín, variedad botánica de la calabacera. Es una planta herbácea anual de la familia de las cucurbitáceas.

Respecto a su origen parece situarse en América aunque no existe consenso al respecto pues algunos lo sitúan en Asia (India) e incluso en África. Lo que si queda claro que es una planta cultivada desde hace muchísimos años en todas las regiones cálidas de la tierra.

Al ser una planta de ciclo corto (de 2 a 4 meses), en Canarias tenemos una producción continua de esta hortaliza durante todo el año.

La forma del calabacín es generalmente cilíndrica aunque también encontramos otras formas más redondeadas. Y pueden presentar distintos colores desde el verde claro hasta el oscuro, existiendo algunos de color amarillo.

Entre los cultivares más producidos en Tenerife destacan los frutos de color verde pálido “Clarita”, de fruto alargado, cilíndrico sin cavidad central (en forma de pepino), y “Santa Lucía” (de características similares), así como los “Casa Blanca” y “Lucía”. Entre los calabacines redondos destaca el “Geode”. Últimamente están introduciéndose variedades de color verde oscuro como el “Zucchini” y “Belor”, híbridos más típicos del mercado peninsular.

El calabacín está compuesto en un alto porcentaje de agua (95,2%) y supone 14 Kcal en 100 gr. debido a esta alta composición en agua y al poseer menos hidratos de carbono (2,9 gr). Es una hortaliza muy rica en potasio, fósforo, magnesio y calcio, y en menor cantidad en hierro, zinc, sodio, etc. Respecto al nivel de vitaminas, importante presencia de vitamina A, C y B9.

Aunque el consumo principal es del fruto, la flor también se consume, principalmente en salteados o rellenas.

Los beneficios que aporta el consumo de calabacines están en que:

• Favorece el sistema cardiovascular.
• Ayuda a eliminar toxinas de nuestro cuerpo.
• Ayuda a la cicatrización de heridas.
• Favorece la contracción y relajación de la musculatura.

Calabaza (Cucurbita pepo acepción para la calabaza común)

La calabaza es un fruto en baya de la familia de las cucurbitáceas, como el calabacín y el bubango. La forma del fruto es muy variada: esférica y achatada (predominante), ovalada y alargada, al igual que el color de su corteza que puede ser anaranjada, amarilla, verde, blanca, negra e incluso morada. Su pulpa es generalmente anaranjada o amarillenta, y está repleta de semillas en su parte central.

La calabaza es muy exigente en temperaturas, no requiere excesiva humedad excepto en la etapa de la fructificación, y se adapta bien a diferentes tipos de suelos. La recolección, dependiendo de las variedades, se suele iniciar a partir de los cinco meses después de la siembra y se encuentran en el mercado a lo largo de todo el año.

La calabaza aparece en numerosas citas de autores antiguos que indican lo arraigado que estaba su cultivo entre los hebreos de la época de Moisés, así como en China y en Egipto, antes de la era cristiana. Por otra parte, entre los restos de algunas tumbas incas precolombinas se han encontrado calabazas y siempre quedan dudas de su lugar de origen. Sin embargo, no fue hasta el siglo XV cuando los españoles introdujeron la calabaza en Europa, donde se propagó en mayor medida por los países de clima más cálido.

Respecto a las clasificaciones, las calabazas se engloban en dos variedades principales:

• Calabaza de verano: variedad de piel clara y fina y semillas blandas. Tiene un periodo corto de conservación. Dentro de esta variedad se encuentra la calabaza bonetera (de color blanco, verde o amarillo), la calabaza espagueti (de color amarillo) y la calabaza rondín (variedad de piel naranja y carne blanquecina).
• Calabaza de invierno: variedad más dulce, pero más seca que la de verano, con menor contenido de agua y piel más gruesa. Se conserva durante más tiempo que la de verano gracias al grosor de su piel. Dentro de este grupo se encuentra la calabaza banana, la de cidra o zapallo (de pulpa gelatinosa e intenso color amarillo) y la confitera o pantana (de forma y color variable), a partir de la cual se obtiene el cabello de ángel, utilizado como relleno en diversos productos de pastelería o en potajes en la gastronomía canaria.

Las variedades de invierno tienen una vida útil mayor que las de verano gracias a su menor proporción de agua. Además, su piel gruesa les sirve de protección. Este tipo de calabazas pueden llegar a conservarse hasta seis meses.

En Canarias, la mayoría del producto cultivado se siembra a partir de semillas seleccionadas por los propios agricultores. Las variedades más apreciadas en nuestro mercado corresponden con las de tipo verde, de formas redondas o cumplidas, por encima de las de tipo violín o cacahuete, de color anaranjado.

En cuanto a sus propiedades de la calabaza su componente principal es el agua. Posee un bajo contenido de hidratos de carbono y apenas grasa lo que le hace un alimento con escaso aporte calórico (27,3 Kcal en 100 gr). Además es buena fuente de fibra.

De la composición de la calabaza cabe destacar su elevado contenido en vitamina A y vitamina C. Presenta cantidades apreciables de vitamina E, folatos y otras vitaminas del grupo B tales como la B1, B2, B3 y B6. Al igual que en otras frutas y hortalizas, entre los minerales de la calabaza, destaca su alto contenido en potasio y su escaso aporte de sodio.

Entre los beneficios que genera su consumo está:

• Facilita el tracto gastrointestinal.
• Favorece un menor riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares y algunos tipos de cáncer.
• Actúa contra el estreñimiento y la retención de líquidos.
• Mejora el sueño.
• Ayuda a la agudeza visual.

Bubango (Cucurbita L. pepo L.)

El bubango es el fruto de la planta herbácea anual llamada bubanguera perteneciente a la familia de las cucurbitáceas. Es una variedad autóctona de Canarias, resultado del cruce de calabaza y calabacín, muy apreciada y que tradicionalmente alcanza mayores precios en el mercado.

El bubango se diferencia del calabacín por su forma y su tamaño, pero sobre todo por su sabor mucho más intenso y una pulpa mucho más carnosa y consistente a la hora de ser cocinada.

Antiguamente el cultivo del bubango se realizaba principalmente en la zona de Anaga, en Tacoronte y en las medianías de la isla de Tenerife. A día de hoy existe este cultivo en otras islas.

Dentro de los cultivares locales de la isla de Tenerife destacan “el bubango cumplido” con forma cilíndrica, piel verde claro y pulpa amarilla oscura en su madurez, y el “bubango redondo” de piel más verdosa, y pulpa blanca y amarilla cuando está maduro.

Estas variedades se han seguido perpetuando en el tiempo gracias a la cuidada selección y mimo de los agricultores, verdaderos mantenedores de la biodiversidad y el patrimonio agrícola canario.

En Canarias hay una producción continua de esta hortaliza durante todo el año y que llegar a abastecer casi el 100% del mercado interior. El bubango es muy apreciado en la elaboración de platos tradicionales como el puchero canario, al ser más sustancioso y sabroso que el calabacín y más consistente tras la cocción.

El bubango es ingrediente fundamental también en el potaje, prefiriéndose en muchos casos o zonas, un producto más curado (cosechado más tarde) por su mayor consistencia y su sabor más intenso.

En cuanto a su composición destaca, al igual que ocurre con los calabacines y la calabaza, su alto contenido en agua y en fibras y su bajo contenido calórico (19 Kcal en 100 gr). A esto se le añade un buen aporte vitamínico destacando la vitamina C y otras vitaminas como B1, B2 y B6. Es destacable también, su bajo contenido en sodio y alto en potasio.

Los beneficios por el consumo de bubango están en:

• Buenas propiedades diuréticas y digestivas recomendando su consumo en dietas de adelgazamiento.
• Facilita la recuperación por la actividad física.
• Acción antioxidante, favoreciendo la formación de colágeno y glóbulos rojos, y el fortalecimiento de huesos y dientes.
• Favorece la absorción del hierro de los alimentos y aumenta la resistencia frente a las infecciones.

Disfruta del bubango, la calabaza y el calabacín a través de la enogastronomía

Y si ahora quieres disfrutar de sus sabores, el sábado 19 de noviembre, a partir de las 12,00 horas, estás invitado a venir al Mercado del Agricultor de Tegueste y experimentar con las elaboraciones que Cristina Torrens, jefa de cocina del Restaurante Compostelana Avenida del Puerto de La Cruz (Tenerife) nos preparará. Y todo ello acompañados de los vinos artesanales de Tegueste de la mano de la Asociación de Viticultores de la Villa de Tegueste (AVITE).

Y con la participación también de la Red Canaria de Semillas que nos acercará a la importancia del bubango, de sus características, potencialidades, importancia en la riqueza de la biodiversidad agrícola de Tenerife, etc.

Fuentes: http://www.5aldia.org/ www.tierra-isleña.com  www.mercatenerife.com  http://www.satcanarisol.es  http://alimentos.org.es http://verduras.consumer.es  http://turismoyculturadecanarias.es